
En Tu Luz Veremos la Luz
A través de la Biblia, vemos que el buscar a Dios es una respuesta a la revelación que hemos recibido de El. Revelación que nos muestra la santidad y justicia de Dios. El es el único manantial de vida para el creyente. El rey Salomón empezó buscando a Dios con un corazón sincero. Vemos en 1 Crónicas. 28:9 que el Rey David advierte a Salomón que sirva a Dios con corazón perfecto: “y si tú le buscares lo hallarás; mas si lo dejares el té desechara para siempre”. Esta advertenci

La Promesa del Espíritu Santo
Dios nos elige y llama para dar fruto y que ese fruto permanezca para su gloria. Al llamarnos, nuestra fe está en el poder de Dios. Para transformarnos, habiendo sido todos nosotros conocidos, el alfarero tiene que hacer una obra grande en nosotros. Al inicio de la iglesia, Pedro nos dice en Hechos 2:39: adelante que la promesa del Espíritu Santo es para todos los creyentes, para cuantos el Señor nuestro Dios llamaré. 1 Juan 15:16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo o

Dios, Nuestro Refugio
De Dios es el Reino, y es soberano sobre toda su creación. El es el Pastor de su pueblo, como también el Juez de toda la tierra. Hebreos 11 es el capítulo de la fe donde muchos dan testimonio del poder del Señor y de su fidelidad. También nos dice que sin fe es imposible agradar a Dios. Debemos entender que nuestra fe tiene que ser en Dios y sus promesas, no en nuestros sueños o esperanzas, en el camino que Dios tiene para cada uno de nosotros. Vemos que Sara en una situació

Vida en Abundancia
La Biblia nos muestra el cuidado de Dios por su creación. Es admirable porque sus cuidados no tienen límites. En Job. 38:41 Dios pregunta a Job “Quien prepara al cuervo su alimento, cuando sus polluelos abandonados claman a Dios?” Vemos que Dios verdaderamente escucha la oración. La promesa de Jesús para su iglesia es que, si pedimos algo en su nombre, el lo va hacer. El nombre de Jesús es para siempre. En el nombre de Jesús serán benditas todas las naciones. Cuando rendimo

La Bondad de Dios
En Mt. 9:13 vemos el corazón de Jesús, que a todos nos dice: “misericordia quiero”. Misericordia es recibir de Dios lo que no merecemos. Jesús nos dice que El no ha venido a llamar a justos sino a pecadores al arrepentimiento. La bondad del Señor es la que transforma nuestros corazones y llegamos a conocer que somos amados por El. Como el caso del hijo pródigo, quien fue recibido por el padre con estas palabras: “ por que este mi hijo muerto era y a revivido; se había perdido

Vasos de Misericordia
El apóstol Pedro le pregunto al Señor: a quién iremos? Y el mismo respondió: tú tienes palabras de vida eterna. El corazón y las palabras de nuestro buen pastor Jesucristo son el manantial de vida para el creyente. Agar llamó el nombre de Jehová: “tú eres Dios que ve”, siendo el corazón de Dios el manantial de vida en nuestras aflicciones. Romanos 9:23-26 y para hacer notorias las riquezas de su gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de antemano